,

Rev Esp Quimioter 2023; 36(3): 226-258

Recomendaciones sobre el uso de antifúgicos azolicos en el paciente oncohematológico

JOSÉ RAMÓN AZANZA, JOSÉ MENSA, JOSÉ BARBERÁN, LOURDES VÁZQUEZ, JAIME PÉREZ DE OTEYZA, MI KWON, LUCRECIA YÁÑEZ, JOSÉ MARÍA AGUADO, ANTONIO CUBILLO GRACIAN, CARLOS SOLANO, ISABEL RUIZ CAMPS, JESÚS FORTÚN, MIGUEL SALAVERT LLETÍ, CARLOTA GUDIOL, TERESA OLAVE RUBIO, CAROLINA GARCÍA-VIDAL, MONTSERRAT ROVIRA TARRATS, MARÍA SUÁREZ-LLEDÓ GRANDE, PEDRO GONZÁLEZ-SIERRA, CARLOS DUEÑAS GUTIÉRREZ

Published: 5 April 2023

http://www.doi.org/10.37201/req/013.2023

La administración de antifúngicos con fines terapéuticos y especialmente, profilácticos es casi un constante en el paciente que precisa tratamiento oncohematológico. El intento de evitar o de tratar infecciones por Aspergillus o por Mucor exige la administración de algunos fármacos pertenecientes al grupo de los azoles, entre los que destacan por su actividad frente a estos patógenos, voriconazol, posaconazol e isavuconazol. Un aspecto de gran importancia es el riesgo potencial de interacciones cuando se asocian a alguno de los fármacos antineoplásico utilizados en el tratamiento de los tumores hematológicos, dando lugar a graves complicaciones. En este sentido, acalabrutinib, bortezomid, bosutinib, carfizolid, ciclofosfamida, ciscloporina A, dasatinib, duvelisib, gilteritinib, glasdegib, ibrutinib, imatinib,nilotinib, ponatinib, prednisona, ruxolitinib, tacrolimus, transretinoico, trióxido de Arsenio, venetoclax, o cualquiera de los alcaloides de la vinca, representan ejemplos muy evidentes de riesgos en unos casos porque su aclaramiento resulta reducido, en otros porque que se potencia el riesgo de prolongación del QTc, especialmente evidentes cuando el fármaco elegido es voriconazol o posaconazol.

Rev Esp Quimioter 2023; 36(3): 226-258 [Full-text PDF]